La casa invita

Compartir

El Centro educativo Don Bosco de Tucumán abre sus puertas a niños, niñas y adolescentes, y los invita a participar de propuestas recreativas y educativas.

Con la colaboración de Romina Herrera.

El Centro educativo Don Bosco de Tucumán es un espacio que convoca a niños, niñas y adolescentes a participar de una variedad de propuestas, como talleres de arte, recreación física, taller de vivero, natación y apoyo escolar para nivel primario y secundario. 

El 6 de mayo de 1966, el centro abrió sus puertas por primera vez como un comedor infantil que atendía las necesidades de una población vulnerable por el cierre de 10 ingenios azucareros que dejaron cientos de personas sin trabajo. Tiempo después su nombre cambió a Centro Educativo Don Bosco, cambiando su paradigma de asistencia hacia un objetivo de promoción integral. “Estamos convencidos que, a través de la educación y la formación, contribuimos a salir de la pobreza estructural y económica”, expresa Sergio Paz, uno de los coordinadores del espacio educativo.

Para el funcionamiento y sostenimiento del espacio educativo, además de los talleristas, desde este año, autosustentados por la obra, se sumó una pieza importante que son los voluntarios. Cada persona que se acerca y se compromete entrega lo mejor de sí. Ellos, junto al staff de educadores, colaboran y acompañan a más de 40 chicas, chicos y jóvenes. Los voluntarios donan una parte de su tiempo al servicio de los más desprotegidos, que muchas veces, son los más olvidados. Bajo el lema “Casa que educa” cada integrante que forma parte de esta casa, escuela, patio e iglesia construye un espacio fraterno, de educación constante y con un común denominador que es el amor que se entrega y ofrece. “Mi primera vez en el comedor, me convertí en profe automáticamente, los chicos te tratan como si te conocieran toda la vida”, comentó Valentín Galindez Seu sobre su experiencia como voluntario.

Por su parte, la voluntaria María Inés Gómez, compartió: “A pesar de que siempre estuve involucrada con la comunidad por ser ex alumna y mamá de cuatro exalumnos salesianos, el ser parte de este Centro maravilloso, el compartir con los niños me hizo crecer aún más en el servicio”.

La experiencia del Centro Educativo Don Bosco en Tucumán es una de las más de 80 iniciativas que brindan respuestas a las diversas problemáticas que viven la infancia y juventudes en barrios y contextos en situación de vulnerabilidad. El relevamiento realizado por el equipo de Ambientes y Servicios Sociales durante el año 2022, da cuenta de la significatividad de las propuestas pastorales, que acompañan diariamente a más de diez mil niños, niñas y jóvenes en situación de vulnerabilidad en toda la extensión de Inspectoría Argentina Norte, brindado oportunidades de estudio, recreación, capacitación laboral, asistencia alimentaria y otras necesidades básicas para su crecimiento y formación para la vida.

BOLETÍN SALESIANO DE ARGENTINA – ABRIL 2023

Noticias Relacionadas

Esto suena a Don Bosco

San Justo. Cuando la música lo cambia todo y a todos.

Hacer realidad la esperanza de un futuro mejor

Por los jóvenes. El invierno es una de mas épocas más duras para la gente que vive en las zonas rurales.

Calor de hogar

Don Bosco en Río Gallegos. En una de las ciudades más australes de la Patagonia el carisma de Don Bosco está más vivo que nunca.

Una parte de Valdocco en Río Tercero

Río Tercero, Córdoba. El Centro Juvenil Salesiano "Ceferino Namuncurá", proporciona contención y educación a más de 150 niños, niñas, adolescentes y jóvenes.