La asistencia y acompañamiento salesiano a los migrantes y refugiados.
Por: Ana María Valle para el Boletín Salesiano de Centroamérica
La movilidad humana es una dinámica global que afecta a millones de personas, con cifras en constante aumento según los informes más recientes de la Organización Internacional para las Migraciones –OIM– y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados –ACNUR–.
En el mes de mayo la OIM publicó el informe sobre las Migraciones en el Mundo 2024, en el que destacó el alarmante incremento en el número de personas que han migrado, en una cifra récord de 281 millones de desplazados en todo el mundo.
Cristo llama a nuestra puerta
Siguiendo las exhortaciones del papa Francisco, quien invita «a reconocer en el migrante no solo a un hermano o una hermana en dificultad, sino a Cristo mismo que llama a nuestra puerta», los salesianos llevan a cabo varios proyectos de acogida para personas desplazadas y migrantes. Entre ellos se encuentran los numerosos centros de acogida y refugio que sehan establecido en diversos países del mundo, especialmente en aquellas rutas comunes de migración. Estos centros proporcionan alojamiento temporal, alimentación, ropa, asistencia médica y espiritual. Además, fomentan la formación y educación profesional a través de programas educativos y de capacitación para los migrantes, ayudándoles a adquirir habilidades que faciliten su integración en las comunidades de acogida y mejoren sus oportunidades de empleo.
Por otra parte, proporcionan asistencia legal y psicológica, ayudando a los migrantes a superar traumas y adaptarse a su nuevo entorno. Y participan en campañas de sensibilización y espiritualidad para promover los derechos de los migrantes y generar una mayor comprensión y solidaridad en las comunidades locales.
Algunos de los centros de acogida para migrantes están estratégicamente ubicados cerca de los países de destino para ofrecer su ayuda a los más necesitados. Algunos de estos centros son:
- Centro Salesiano de Migrantes en Italia. En ciudades como Turín y Roma, los salesianos han establecido centros que no sólo brindan asistencia básica, sino también clases de idioma italiano, talleres de inserción laboral y actividades culturales para fomentar la integración.
- Interstate Migrants Alliance for Transformation, Kerala en India. Este proyecto apoya a los migrantes mediante servicios de asistencia técnica en la defensa de los derechos de los trabajadores migrantes, garantizando así su bienestar.
- Red Salesiana en el Corredor Migratorio del Mediterraneo. En países como España, Italia y Grecia, los salesianos trabajan juntos para ofrecer asistencia a los migrantes que llegan del mar Mediterraneo, un proyecto peligroso que muchas personas emprenden buscando una vida mejor.
- Proyecto Salesiano Tijuana en México. Este proyecto vela por la defensa de los derechos humanos de los migrantes, atendiendo especialmente a los más vulnerables. Cuenta con cinco oratorios, un comedor y un albergue. Inspirados por Don Bosco, quien también fue un migrante, los salesianos ofrecen esperanza y apoyo a miles de migrantes en todo el mundo a través de sus programas y centros. Esta labor humanitaria ayuda a las personas desplazadas a reconstruir sus vidas e integrarse en nuevas comunidades.
- Don Bosco Ngangi: un refugio de esperanza. El conflicto armado en la República Democrática del Congo ha obligado a miles de personas a huir de sus hogares, especialmente hacia la ciudad de Goma, donde se encuentra Don Bosco Ngangi, refugio que acoge a más de tres mil quinientas familias. La mayoría de los refugiados son niños, alrededor de diecinueve mil que necesitan un espacio seguro para jugar y recibir asistencia psicosocial para enfrentar el trauma de la guerra. También se encuentran entre los grupos vulnerables las mujeres embarazadas y los ancianos, quienes sobreviven en carpas improvisadas en campos de fútbol. En total, unas treinta y dos mil personas reciben apoyo de los salesianos en Don Bosco Ngangi. Esta ayuda se traduce en alimentos, educación, cuidado psicológico, pastoral y espiritual. Sin embargo, la situación en estos campos es difícil, ya que no cuentan con ayuda gubernamental al no ser una localidad oficial.
BOLETÍN SALESIANO DE ARGENTINA – NOVIEMBRE 2024